Bienvenido a Ingalsa

8 a 14 y 15 a 19

La galvanización en caliente, es un procedimiento para recubrir piezas de acero mediante su inmersión en un crisol de zinc fundido a una temperatura entre 435 y 455 °C. Tiene como principal objetivo evitar la corrosión que la humedad y la contaminación ambiental pueden ocasionar a las piezas.

Muchos confunden el galvanizado con el zincado, y de hecho muchas fuentes hablan de ellos como sinónimos, pero se tratan de técnicas distintas, y por eso se rigen por normas UNE diferentes.

El proceso de galvanizado en caliente por inmersión, consigue un recubrimiento de 45-200 micras (de alta duración, regulado por la norma UNE EN ISO 1461). Al alearse metalúrgicamente el zinc con el acero, se crean capas intermetálicas que tienen una gran adherencia, muy resistentes a los golpes y de gran dureza.

Es una técnica especialmente indicada para su uso en el exterior y en ambientes húmedos o corrosivos de los materiales.

VENTAJAS DEL PROCESO DE GALVANIZADO

  • Enorme durabilidad *
  • Gran fiabilidad
  • Mantenimiento innecesario
  • Tenacidad del recubrimiento
  • Recubrimiento integral
  • Gran resistencia
*El recubrimiento de zinc obtenido del proceso de galvanizado puede durar:
-Hasta 100 años en ambiente rural
-40-100 años en ambiente urbano
-20-40 años en ambiente industrial
-10-20 años en entorno marino